Hace mucho tiempo vivió un indígena llamado Camicao, a él se le apareció el dios azteca llamado Quetzao este dios le regaló la planta de cacao, entonces Camicao lo cultivó. Luego de que el cacao dio frutos, Camicao le obsequió un poco de cacao al rey Fernando. El rey Fernando le pidió a su sirviente que haga una bebida con la pulpa del cacao, entonces probó la bebida y le encantó y dijo: – esta bebida sólo podrá tomarse en los banquetes reales y los rituales, también se le otorgaba tomar a los guerreros.
En el pueblo azteca se rumoreaba que había llegado una embarcación con soldados desconocidos y un pueblo lejano, con plateadas armaduras y con tecnología avanzada, eran los españoles. El general Cortés se presentó con el rey Fernando, quién le permitió que se queden en su palacio, sin embargo, Cortés se aprovechó de la confianza que el rey le ofreció y robó el cacao para ir hacia España.
En el viaje a España los españoles se encontraron con unos piratas, quienes buscaban un tesoro, estos piratas atacaron el barco de Cortés y se llevaron el cofre hacia su isla tenebrosa. Los piratas abrieron el cofre pensando que era oro, pero al ver que era cacao lanzaron el cofre al fondo del mar. Quetzao, dios de los aztecas se enfureció y lanzó una maldición a los piratas.
El dios que se le apareció a Camicao para avisarle que los españoles los visitarían para saquearles todo el cacao, Camicao informó al rey Fernando y empezaron a preparar a los soldados indígenas con lanzas y escudos para defender su cacao. La tropa de Cortés regresó al pueblo, pero los aztecas les recibieron con armas, fue una lucha violenta donde los aztecas iban perdiendo, tenían muchas bajas en su ejército, pero finalmente los aztecas salieron victoriosos y los españoles regresaron con las manos vacías.
En España los Reyes al ver que Cortés y su tripulación llegaron sin el dulce tesoro se enfurecieron y los condenaron a hacer trabajos de limpieza en el palacio y a comer comida podrida con los cerdos.
Los aztecas se quedaron con el cacao, agregaron miel y canela, transformándolo en chocolate, de esta forma no era solamente para el rey y los guerreros, sino para todo el pueblo. Camicao fundó una empresa de chocolate expandiéndola por todo el mundo, haciendo que el chocolate sea famoso y muy reconocido por el mundo siendo el pueblo azteca el que creó el chocolate.
FIN
